Buenos días a todos, comenzamos la oración en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.
Cada día surgen problemas, conflictos a los que tenemos que hacer frente. Si mostramos indiferencia, es decir, si hacemos como que no ha pasado, ese problema no desaparecerá, sino que se hará siempre más grande.
Sin embargo, si nos enfrentamos a ellos, seremos capaces de entenderlo y de ponerle remedio, haciendo que nuestra vida pueda seguir adelante.
Escuchamos con atención e siguiente cuento:
- ¿Qué apareció un día sin avisar y sin explicación?
- ¿Qué le ha ocurrido al elefante al principio?
- Al no hacerle caso, ¿qué le pasaba?
- ¿Y al final, cómo se portaron con él?
Jesús se enfrentó a los problemas que le surgieron, que a pesar de sus dificultades las afrontó.
Padrenuestro.