Lunes 3 de mayo

Buenos días a todos. Hoy comenzamos una semana nueva, y lo haremos escuchando este precioso cuento: Mamá,¿De qué color son los besos?

- ¿Te ha gustado el cuento? ¿por qué?

- ¿Y a ti, cuáles son tus besos preferidos?

- ¿Y los de mamá?

Pensamos en nuestras mamás y en María nuestra Buena Madre...

Cerramos los ojos, pensamos en la cara de nuestra madre...

Recordamos cómo son sus ojos...

Recordamos el beso que nos ha dado hoy al despertarnos...

Recordamos las caricias que ella nos hace...

Recordamos las palabras que ella nos ha dicho cuando se despedía de nosotros para venir al cole...

MARÍA nos habla y es como nuestra mamá, sus manos son muy hermosas porque nos cuidan, nos miman, nos protegen...

Ayer celebramos el día de la madre, y por eso hemos querido recordar que mamá siempre estará ahí para nosotros como dice el cuento. 

¡Felicidades a todas las madres del mundo!

  • Padrenuestro.

Lunes 3 de mayo

Alegría

¡Empezamos el mes de mayo!, y como todos ya sabéis, éste es el mes las flores: ¡es primavera!, el sol que durante el invierno parecía estar escondido aparece ahora dando calor y vida. ¿Os habéis fijado en los árboles que hasta ahora parecían palos secos? En sus ramas han brotado hojas nuevas, y muchas plantas están ahora floreciendo. 

Este mes también es el mes dedicado a María, nuestra Madre. Lo que vamos a hacer durante estos días será regalarle una flor para mostrarle nuestro cariño. En la flor de hoy está escrita la palabra “Alegría”. Como es el mes las flores, que tanto alegran nuestros jardines, nuestras casas, nuestro colegio,... nosotros queremos también sembrar alegría. 

Rezamos a María: 

María, tú que eres una mujer alegre, enséñame a tener siempre una sonrisa sincera para los demás. Que allí donde vaya sepa llevar alegría. Te pido por todos los que están tristes, que descubran la alegría de tener un Dios bueno que les acompaña siempre. 


Evangelio del 3 de mayo. Festividad de los apóstoles Santiago y Felipe


 Jn 14, 6-14

Jesús dijo a Tomás: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida. Nadie va al Padre, sino por mí. Si me conocéis a mí, conoceréis también a mi Padre. Ahora ya lo conocéis y lo habéis visto.

Felipe le dijo: Señor, muéstranos al Padre y nos basta. Jesús le replicó: Hace tanto que estoy con vosotros, y no me conoces, Felipe? Quien me ha visto a mí ha visto al Padre. Cómo dices tú: Muéstranos al Padre? No crees que yo estoy en el Padre, y el Padre en mí? Lo que yo os digo no lo hablo por cuenta propia. El Padre, que permanece en mí, hace sus obras. Creedme: yo estoy en el Padre, y el Padre en mí. Si no, creed a las obras. Os lo aseguro: el que cree en mí, también él hará las obras que yo hago, y aún mayores. Porque yo me voy al Padre; y lo que pidáis en mi nombre, yo lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. Si pedís algo en mi nombre, yo lo haré.