Cuando Jesús acabó de lavar los pies a sus discípulos, les dijo: «Os aseguro, el criado no es más que su amo, ni el enviado es más que el que lo envía. Puesto que sabéis esto, dichosos vosotros si lo ponéis en práctica. No lo digo por todos vosotros; yo sé bien a quiénes he elegido, pero tiene que cumplirse la Escritura: ‘El que compartía mi pan me ha traicionado’. Os lo digo ahora, antes de que suceda, para que cuando suceda creáis que yo soy. Os lo aseguro: El que recibe a mi enviado me recibe a mí; y el que a mí me recibe, recibe al que me ha enviado».
¿Qué es ser misionera o misionero? A nuestras Madres Escolapias las podemos llamar "misioneras permanentes". Muchas han decidido irse a otros países durante un tiempo, para hacer todo lo posible por la gente de allí. su gran labor es estar al lado de los que más lo necesitan: hablan con ellos, les escuchan, les ayudan a cocinar, echan una mano para organizar los colegios.
Actividades la carrera solidaria, el bocadillo solidario, la fiesta de la familia, el desfile solidario que se organizó otro año, no son más que diferentes actividades que llevamos a cabo para ayudar y con todo lo recaudado lo destinamos a cubrir una misión como puede ser ayudar a construir un colegio como fue el de Kattuvilai, en el mantenimiento de las comidas de las niñas, en Guinea y otros países, ayudar en definitiva...) porque nosotros también podemos ser misioneros y misioneras como ellas.
- ¿Te animas a ayudar?
- ¿Te irías a otro país a ayudar a quienes más lo necesitan?
No es necesario responder en alto.
Hoy vamos a darle las gracias a Jesús por la suerte que tenemos con las madres Escolapias. Ellas son ejemplo VIVO del estilo de Jesús, María y Madre Paula Montal.