¿Cómo va la semana? Vuestras caritas, a través de las miradas dicen que todo marcha estupendamente.
María es un ejemplo de disponibilidad y entrega. La mamá perfecta en quien fijamos nuestros ojos para ser cada día mejores. Ella nos enseña a tener fe en medio de las dificultades.
Os invitamos a escuchar este cuento, y después responder a algunas preguntas:
- ¿Es mágica tu mamá?
- ¿Qué hace que sea mágica?
- Si tuvieras que destacar algo de ella. ¿qué sería?
María, nuestra Buena Madre salvó nuestro mundo, se comprometió y luchó por mejorar el planeta llenándolo de amor.
Los discípulos iban subiendo camino de Jerusalén, y Jesús se les adelantaba; ellos se extrañaban, y los que seguían iban asustados. Él tomó aparte otra vez a los Doce y se puso a decirles lo que le iba a suceder: Mirad, estamos subiendo a Jerusalén, y el Hijo del hombre va a ser entregado a los sumos sacerdotes y a los escribas, lo condenarán a muerte y lo entregarán a los gentiles, se burlarán de él, le escupirán, lo azotarán y lo matarán; y a los tres días resucitará. Se le acercaron los hijos de Zebedeo, Santiago y Juan, y le dijeron: Maestro, queremos que hagas lo que te vamos a pedir. Les preguntó: Qué queréis que haga por vosotros? Contestaron: Concédenos sentarnos en tu gloria uno a tu derecha y otro a tu izquierda. Jesús replicó: No sabéis lo que pedís, sois capaces de beber el cáliz que yo he de beber, o de bautizaros con el bautismo con que yo me voy a bautizar? Contestaron: Lo somos. Jesús les dijo: El cáliz que yo voy a beber lo beberéis, y os bautizaréis con el bautismo con que yo me voy a bautizar, pero el sentarse a mi derecha o a mi izquierda no me toca a mi concederlo; está ya reservado. Los otros diez, al oír aquello, se indignaron contra Santiago y Juan. Jesús, reuniéndolos, les dijo: Sabéis que los que son reconocidos como jefes de los pueblos los tiranizan, y que los grandes los oprimen. Vosotros, nada de eso: el que quiera ser grande, sea vuestro servidor; y el que quiera ser primero, sea esclavo de todos. Porque el Hijo del hombre no ha venido para que le sirvan, sino para servir y dar su vida en rescate por todos.
Cierra los ojos durante unos momentos y piensa en ese lugar de montaña que tanto te gusta, o aquella playa tan bonita a la que vas algún verano. ¿Verdad que es un sitio bonito? La naturaleza es algo increíble. Es un milagro. La creación es un regalo de Dios, por eso tenemos que cuidarla. Un papel en el suelo, un cristal tirado en medio del campo pueden hacer mucho daño a la naturaleza.
En un ratito de silencio podríamos pensar hoy un compromiso para cuidar mejor la naturaleza, como por ejemplo, no tirar papeles al suelo. Que cada uno piense el suyo.
(silencio)
Y ahora podemos ofrecerle ese compromiso a la Virgen, para que ella nos ayude a amar y respetar la naturaleza.
Rezamos a la Virgen:
Madre, quiero cuidar la naturaleza porque es un regalo de Dios. Ayúdame a respetarla.