Buenos días a todos, comenzamos la oración en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén,
Al comenzar la mañana te abro mi corazón, para que siempre te escuche.
La relajación de la rana. Nos sentamos como indios con la planta de los pies una contra otra y escuchamos atentamente lo que dice el vídeo.