Mateo 6, 7-15:
"Vosotros orad así: Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo, danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal".
Al comenzar la Cuaresma, decíamos que uno de sus pilares es la oración.
Realizarla con mayor frecuencia y con mayor profundidad.
Medita y contempla y recita hoy las palabras del Padre Nuestro.
Es la oración que resume todo el contenido que ha de tener la oración cristiana. Detente a lo largo del día meditándola, contemplándola y rezándola todas las veces que puedas y tengas oportunidad.
Verás cómo las palabras y la enseñanza de Jesús calan profundamente en tu corazón. Buenos días.