Viernes 29 de abril

Buenos días a todos, comenzamos la oración en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén. Respiramos con tranquilidad y cerrando los ojos, pensando en nuestra Buena Madre, María.

El domingo será el Día de la Madre y es por este motivo que vamos a fijarnos en el siguiente vídeo:


- ¿Qué puedes decir de tu madre?
- ¿Cómo es?

El día de la Madre es todos los días, no solamente el domingo.

 


Evangelio del 29 de abril

 

San Mateo 11,25-30

En aquel tiempo, exclamó Jesús: «Te doy gracias, Padre, Señor de cielo y tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos y se las has revelado a la gente sencilla. Sí, Padre, así te ha parecido mejor. Todo me lo ha entregado mi Padre, y nadie conoce al Hijo más que el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar. Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré. Cargad con mi yugo y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y encontraréis vuestro descanso. Porque mi yugo es llevadero y mi carga ligera.»

Jueves 28 de abril

Buenos días a todos, en unos días celebraremos el día de la madre y hoy vamos a rezar a María, nuestra Buena Madre.

Os invitamos a escuchar con atención el siguiente vídeo:


Cada uno en silencio va a pensar en su mamá y en el cariño que nos da cada día.



QUERIDA MAMÁ,
GRACIAS POR ACOMPAÑARME TODOS LOS DÍAS.
POR AYUDARME A SER BUENA PERSONA, 
A SER SERVICIAL.

MARÍA, AYÚDAME A TENER SIEMPRE UNA SONRISA PARA TODOS,
YA QUE ILUMINA EL MUNDO.




Evangelio del 28 de abril

San Juan 3,31-36

EL que viene de lo alto está por encima de todos. El que es de la tierra es de la tierra y habla de la tierra. El que viene del cielo está por encima de todos. De lo que ha visto y ha oído da testimonio, y nadie acepta su testimonio. El que acepta su testimonio certifica que Dios es veraz.
El que Dios envió habla las palabras de Dios, porque no da el Espíritu con medida. El Padre ama al Hijo y todo lo ha puesto en su mano. El que cree en el Hijo posee la vida eterna; el que no crea al Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios pesa sobre él.