Miércoles 10 de febrero

¡Buenos días a todos!

¿Qué tal han ido estos días? ¿Cómo nos hemos sentido? ¿Habéis echado de menos a alguien?

Jesús quiero estar un rato contigo. Quiero ver como tú tratabas a las personas, para ver si yo puedo hacerlo también. Cierro los ojos y me imagino que estoy contigo y con tus amigos, y veo lo que hacíais.

Jesús no paraba. Era impresionante las cosas que hacía cada día. Comer con los amigos, curar a los enfermos, rezar, salir al camino, atender a las personas,… Seguro que llegaba agotado.

Mucha gente te busca Jesús, porque necesita tu ayuda, los que tienen enfermedades y también, los que lo pasan mal. 

Jesús atiende a todos porque no quiere que nadie esté mal, y Jesús nos recuerda que pensemos un poco en las personas que lo pasan mal y poner nuestro empeño en cuidar de ellos.


Gracias Jesús por cuidarnos cada día.



Evangelio del 10 de febrero


 Mc 7, 14-23

Martes 9 de febrero

Los problemas suceden en nuestro día a día. A veces nos afectan más y otras veces menos. 

Los cristianos tenemos el regalo de poder sacar fuerzas de la oración, de Dios para afrontar los problemas, nuestro día a día y lo que venga. 

Confía en Él, porque quiere cuidarte HOY y a TI. 

Simba sufre momentos muy complicados de pequeño y decide irse lejos de su casa. En su camino, conoce a Timón y a Pumba, los cuales intentan enseñarle cómo les gusta vivir a ellos. Antes los problemas, la actitud es fundamental. Por eso; “hakuna matata”.


Cuando tenemos problemas, estamos tristes por algo: podemos afrontarlo de muchas formas. Timón y Pumba quieren enseñarnos que una de esas formas, es ver las cosas buenas que tenemos para afrontar así mejor, los problemas.

Vamos a decir en voz alta aquellas cosas, personas o momentos que nos gustan, que nos hacen felices en nuestros días

En silencio, le damos las gracias a Jesús por todo lo bueno que tenemos en nuestra vida.

Padrenuestro.

Lectura del 9 de febrero

 


Gen 1, 20; 2, 4