Lunes 22 de marzo

Buenos días a todos, hacemos un momento de silencio para calmarnos y poder entrar en la oración de hoy. Respiramos hondo: 1...2...y 3 veces. Para ayudar, escucharemos tranquilamente lo siguiente:

Ahora me imagino que estoy en la época de Jesús. Me imagino a un grupo de gente sentada a la sombra de unos árboles y veo a Jesús en medio de toda esa gente, como si estuviera dando una clase. Me acerco a ver qué me dice.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén. Todos tenemos en nuestra vida a personas que nos quieren muchísimo: mamá, papá, los hermanitos, abuelos, tíos, primos, vecinos, amigos, maestras, profesores... Esas personas nos demuestran su amor con palabras bonitas y agradables, con sonrisas, besos y sobretodo, con abrazos. Pero no todos tienen esa suerte.

Hay personas que están solas y no tienen a nadie. Por ello, debemos dar las gracias a Jesús por el regalo tan grande que nos da.

Ahora te invitamos a que te des un abrazo a ti mismo/a muy fuerte y pienses en todas esas personas que te quieren.

¿Sabes quién está "chiflado" por ti?


Jesús, hoy solamente me gustaría decirte: ¡Te quiero!

Padrenuestro.


Evangelio del 21 de marzo

 

Lc 4, 24-30

Viernes 18 de marzo

Buenos días, finalizamos la semana, cargados de energía, comprometidos y con un gran corazón abierto, dispuesto a ayudar y orgullosos de poder ofrecérselo a Jesús. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.

Por favor, estad muy atentos a lo siguiente:


- ¿Qué os ha parecido el vídeo?
- ¿Quiénes creéis han aprendido más?
- ¿Y disfrutado más?

Todos están llevando a cabo un precioso proyecto que les va a cambiar sus vidas. ¿Por qué?

Compartir tiempo y ayudarse mutuamente entre todos es el mayor regalo que podemos hacernos.

Dale al play y puedes pararlo en 0:21


Jesús, hoy te damos gracias por nuestros mayores. Gracias a ellos hoy estamos aquí, su esfuerzo, dedicación, trabajo, superación, constancia, compromiso, valentía y amor nos hacen sentirnos muy orgullosos de ellos.
Algunos tienen la suerte de verlos todos los días, otros solamente en algunas ocasiones, y el resto, los tenemos presentes en un lugar muy, muy especial, y todos los tenemos en nuestros corazones.

Padrenuestro.











Evangelio del 18 de marzo

 

Mt 21, 33-43; 45-46