Buenos días a todos, ¿qué tal te ha ido durante el fin de semana? Ahora es momento de cerrar los ojos, respirar tranquilamente y recordarlo.
Comenzamos la oración en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.
"Camino"
No sé si os habéis perdido alguna vez por el campo, pero os aseguro que no es nada bonito.
Cuando alguien se pierde tiene miedo, no sabe si ir hacia delante, hacia atrás, a la derecha, a la izquierda, no se sabe cuándo va a encontrar el camino y llegar a casa. ¡Imaginaos qué susto! ¿Y los que están esperando a que llegue? ¡Estarán muy preocupados!
Rezamos a María:
Madre, cuando me porto mal, es como si me hubiera perdido, porque me siento mal, no me gusta hacer daño a los demás. Acompáñame, quiero hacer el bien, ayudar a los demás, ser como Jesús y como Tú.