Comenzamos nuestra oración en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.
Conocéis el cuento del patito feo, ¿verdad?
Lo habréis oído muchas veces; habréis leído la historia, incluso la habréis visto en película de dibujos animados. A los mayores también os gusta esta historia y cada vez que alguien os la cuenta es como si fuera la primera vez... en cada una de ellas hemos imaginado algo diferente y en todas y cada una hemos aprendido algo maravilloso...
Vamos a verlo:
- ¿De qué va el cuento?
- ¿Qué le pasaba al patito blanco al principio? ¿Estaba alegre o triste?
- ¿Y después? ¿Quién le ayudó a darse cuenta de lo bonito que era?
Vamos a terminar rezándole a María. Ella, al igual que nuestra mamá o papá, nos quiere mucho y para ella, somos unos niños y unas niñas preciosos.