Viernes después de ceniza
Introducción
Nos saludamos e invitamos a la serenidad. Dejamos a un lado lo que nos pueda distraer. Nos sentamos de una forma adecuada y nos disponemos a poner nuestro día de hoy en las manos del Señor. Queremos contar con Él
Gracias porque puedo amar
“El amor es paciente; el amor es servicial; el amor no es envidioso ni engreído; el amor no busca interés ni se irrita; no toma en cuenta el mal; no se alegra de la injusticia; se alegra de la verdad. Todo lo cree y todo lo espera; todo lo excusa y todo lo soporta. El amor no acaba nunca.”
(1ª Cor 13)
Para pensar y agradecer
Invitamos a interiorizar cerrando los ojos:
- Piensa en las personas que quieres y que te quieren
- Deja que vengan a tu mente y a tu corazón.
- Da gracias a Dios por ellas y pídele que en este tiempo de cuaresma seas capaz de amarlas más.
Oración
Querido Jesús: necesito crecer y dar más amor a los demás. Tengo muchas cosas buenas para dar. Enséñame a ofrecerlas a los demás.
Que ayude en mi casa, que colabore en el colegio, que eche una mano a mis amigos, que ayude siempre y en todas partes porque el amor es lo más grande que hay.
Quiero vivir como tú: amando a los demás.